El 3er. Chakra es el del plexo solar (manipura = gema brillante). Está ubicado arriba del ombligo, en la base del esternón.
El cambio y el movimiento relacionados con este chakra implican la transformación del yo en un ser de poder y de fuerza de voluntad.
Nos revela nuestro derecho a existir y nuestra situación en el Universo. Promueve la autoaceptación, la conciencia de la individualidad y la sabiduría espiritual. Integra la emoción y la mente. Se lo asocia con la extroversión, con la integración amor-sexo y con la autocuración.
Es el centro crucial del cuerpo, desde donde se distribuye la energía física.
Su elemento es el Fuego. Vibra con el color amarillo. El sentido asociado es la vista.
Se utilizan piedras de color amarillo (citrino, topacio imperial, calcita, cuarzo rutilado, fluorita amarilla) y verde (malaquita, azurita c/malaquita, aventurina verde, crisoprasa).
Cuando está equilibrado observamos: energía, autoridad, estabilidad emocional, capacidad de decisión y análisis, serenidad, capacidad de transformación, disposición al cambio.
Cuando está bloqueado la persona muestra poca fuerza de voluntad, de determinación y de confianza en sí misma; encuentra que le faltan objetivos, metas, aspiraciones y voluntad para poder concretarlas.
Cuando está hiperactivado: la persona es egocéntrica.
Los aspectos a trabajar son: miedo, ira, amargura, rigidez ante los cambios, exagerada devoción, extremo intelectualismo, el sentirse muy ocupados en sí mismos